Jacob se acercó a Isaac su padre, y él lo palpó y dijo: La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú. (Génesis 27:22)Este pasaje de la Biblia me lo encontré en uno de los capítulos del libro “La Máscara de Sanidad” del Dr. Hervey M. Cleckley, uno de los textos de psiquiatría donde mejor se explica el fenómeno de la psicopatía. Un psicópata no es necesariamente un criminal, es más la Dra. Stout nos recuerda que solo un porcentaje de aquellos en prisión tienen personalidad psicópata (aproximadamente 15%?) y que 1 de cada 25 personas tiene personalidad psicopática. Más aún la Dra. Stout escribe en el libro “The Sociopath Next Door”:
El mundo es un lugar peligroso para vivir, no por causa de aquellos que hacen el mal, pero si por causa de aquellos que observan y dejan que el mal ocurra".( Albert Einstein).Para hacer algo acerca de los [psicópatas] primero tenemos que reconocerlos.“Después de escuchar por casi 25 años a las historias que mis pacientes me cuentan acerca de los [psicópatas], …cuando me preguntan “¿Cómo sé en quién no confiar?” La respuesta que doy por lo general sorprende a la gente. La expectativa natural es que voy a describir algún comportamiento con un detalle que suena sinistro o un retazo de comportamiento corporal o un uso de lenguaje amenazador que es la revelación sutilEn cambio… la información confidencial es ninguna de estas cosas… En vez, la mejor prueba es, de todas las cosas, es el juego de lástima. El signo más confiable, el comportamiento más universal de las personas sin escrúpulos no es dirigido, como uno se podría imaginar, a nuestro miedo. Es, perversamente, un apelo a nuestra simpatía.Así es, un apelo a nuestra conciencia. Lo más interesante es que lo que caracteriza a los psicópatas es precisamente eso, que no tienen conciencia y por ende empatía para con los demás. Ellos saben que nosotros tenemos empatía y utilizan este conocimiento en contra de nosotros, sin misericordia alguna.La Dra. Martha Stout dice:
Tan obvio como la nariz en nuestra cara, y tan difícil de ver sin la ayuda de un espejo, la explicación es que las personas buenas permiten que individuos patéticos cometan asesinatos, por así decirlo, y por entonces cualquier [psicópata] deseando de continuar con este juego, cualquiera que sea, debe jugar repetidamente por no otro que lástima. Cuando tenemos lástima, somos, al menos por un momento, indefensos…” [...]Nuestra vulnerabilidad emocional cuando damos lástima es utilizada en contra de nosotros por aquellos que no tienen conciencia. Lástima y simpatía son fuerzas para el bien cuando son reacciones para la gente merecedora que han caído en desgracia. Pero cuando estos sentimientos son arrancados de nosotros mismos por gente que no se lo merece, cuyo comportamiento es consistentemente anti-social, esto es un signo seguro que algo anda mal, un signo potencialmente útil que por lo general pasamos por alto....Los psicópatas usan una máscara de sanidad que es perfecta, están llenos de promesa y palabras muy ricas pero falsas, por son mejor rebeladas por sus acciones.
Estudiando más a fondo el tema de psicopatía me topé con el tema de psicópatas sexuales explicado por la psicóloga Anna C. Salter. La Dra. Salter ha entrevistado cientos de psicópatas sexuales en cárceles, tratando de entender más a fondo su comportamiento. Salter nos explica que las personas se aferran a ilusiones acerca de sí mismas, acerca el control que tienen en sus destinos, y acerca la benevolencia de este mundo. Aparentemente estas ilusiones positivas tienen un impacto negativo en nuestra susceptibilidad a los psicópatas y estas ilusiones son por si mismas susceptibles al impacto del trauma, que a veces las destrozan, dejando un mundo sombrío en su despertar. El pensar que hay bien en todas las personas de este mundo podría dejarnos susceptibles a las tácticas de los psicópatas. Algunas características de los psicópatas las he resumido en el post “La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú”. Ahora tomemos un ejemplo del libro de Anna C. Salter "Predadores: Pedófilos, Violadores y otros ofensores sexuales: Quiénes son, cómo operan y como podemos proteger a nuestros niños y a nosotros mismos", donde se hace referencia a una de las anotaciones de Michael DeBardeleben, un sádico que mantenía voluminosas anotaciones de sus explotaciones. Entre estas notas encontramos su receta para una relación:
Un hombre tiene que estar consciente de todo esto:-Obtener su satisfacción tempranamente-Aislar sus contactos con otros-No dejar que ella haga ninguna decisión -No dejar que adquiera ninguna habilidad (trabajar, manejar, habilidades sociales, etc.)-No dejar que ella tenga ningún poder (cuentas bancarias, propiedad, información-material para chantaje)-No confíes en ella completamente-No la “ilumines” con conocimiento (especialmente de psicología)-Recuérdale siempre que la relación es temporal+mejor prepararse para “cortar” antes de que ella te lo haga a ti.-Pon el “precio” más alto de lo necesario al principio; látigo, infidelidad, humillación extrema- y después redúcelo gradualmente para mantenerlo a un nivel necesario.-Busca activamente a una “nueva” compañera cuando ella comienza a mostrar signos de rebelión.-Hazla más dependiente: drogas? Vivir en la zona rural. No teléfono (u oculto-para mi uso nada más), no licencia de conducir, no libros (excepto fantasía), no ropas finas, no doctores. -No muestres debilidad, culpa o inseguridad.Y que haría una mujer con esta clase de conocimiento acerca de los psicópatas... ¿cuántas vidas se salvarían? El conocimiento protege... Y este es solo un ejemplo minúsculo. Extrapolemos este ejemplo de cómo piensa este particular psicópata a los líderes psicópatas que están a cargo de este mundo y obtendremos una mejor idea de lo que está sucediendo en este mundo.
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