Monday, April 28, 2008

A mi no me interesa tener un millón de amigos, con los que tengo me basta.

Estoy a punto de volverme loco, hace un par de años, conocí el Fotolog, después conocí el Hi5, después el Facebook, Badoo, MySpace, después el Windows Live Space y en todas esas páginas abrí un perfil ¡Dios! Qué afán de vivir pegado a la PC, pero caray, esto no es una moda, las modas van y vienen, pero este tipo de sites en Internet, conocidos por los especialistas como “Redes Sociales” están aquí y llegaron para quedarse.

Según el semanario The Economist, tan sólo en agosto de 2007 estas páginas alcanzaron los 68.5 millones de visitas, ¿increíble verdad? Y sólo para darnos un quemón, Hi5 tiene registrados 40 millones de usuarios/perfiles únicamente en Latinoamérica. Como vemos el crecimiento de las Redes Sociales se está acelerando, captando a jóvenes de todo el mundo, pero ¿por qué?

Estar fuera de onda es la principal causa por la que alguien se ve obligado a abrir un perfil en alguna de estas páginas, así me pasó, pues de pronto un día, todos mis amigos, mis contactos del MSN me pedían que les firmara, “posteara”, en su Fotolog y lo hacía, pero entonces dije “¿Y a mí por qué nadie me postea”, yo también quise que me firmaran, así que hice el mío.

Pasó igual con el Hi5 y con todas los demás espacios. Y aunque la moda o el hecho de estar o no en onda es lo que hace prosperar o decaer a estas webs, el tener un perfil en la red es algo que para los jóvenes es primordial. Transportar nuestra vida al mundo virtual resulta esencial si no queremos vernos como analfabetas del siglo XXI. Actualmente, colocar nuestras fotos, nuestros datos, aficiones, experiencias, intereses, deseos en una de estas redes sociales virtuales nos ayuda a relacionarnos.

El psicólogo Julio Álvarez Santiago de la Universidad Autónoma de Tamaulipas define este fenómeno así: “El ser humano busca siempre la pertenencia a un grupo y relacionarse con otras personas, acción que estos sitios facilitan en gran medida”, además el hecho de que páginas como Hi5 o Facebook tengan como punto central las fotografías “…permite a los jóvenes desarrollar el egocentrismo necesario para sentirse únicos dentro de un grupo y a la vez sentirse parte de él.”

Y es cierto, las imágenes fotoshopeadas nos dan la oportunidad de lucir bellos o, al menos, no tan desagradables a la vista de los demás cibernautas y así poder tener más contactos en nuestros perfiles, conocer a más personas, que más gente tenga el deseo de conocernos y, ¿por qué no?, hacer más amigos no sólo virtualmente, sino también en la vida real. Yendo más lejos, hasta conocer al amor por el cual se vive, cosa que también es posible y que ocurre, todos conocemos al menos un caso de este tipo, por ejemplo mi amigo David encontró así el amor y ahora “dice” que es feliz. (¡plop!).